sábado, 21 de enero de 2012

Aquella mañana nublosa empezó a ir en decadencia, él se levanto con sudores como por una pesadilla, no sabia que habia ocurrido aquella noche, el sueño y el ensimismamiento de aquel libro volvieron a hacer de las suyas. Tenia pendiente retomar los escritos de sus pensamientos, a los que solo los mas allegados dejaba leer. Quedaba aun mucho por hacer, debería levantarse, desperezarse, ponerse la música, coger papel y lápiz y ponerse a escribir. Pero ¿que escribir? había tantos temas de los que escribir para alguien anónimo, temas de los que nunca se atrevería a hablar o que quizás nunca sintiera por él. No se le ocurrían ideas, ¿ acaso no sentía nada por esta persona? o ¿ quizás no hubiera nadie tan interesado como para contárselo? ¡Ya está! la niebla que ocupaban sus pensamientos se había disuelto, comenzó a escribir: 
" Aquella mañana nublosa empezó a ir en decadencia... "

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